La mantención de vehículos es un aspecto esencial para garantizar el correcto funcionamiento, la seguridad y la durabilidad de cualquier automóvil.
Realizar un mantenimiento adecuado no solo prolonga la vida útil del auto, sino que también previene posibles averías y optimiza el rendimiento.
Pero ¿en qué consiste la mantención de un auto específicamente? Te invitamos a conocer los tipos de mantenciones necesarias, su frecuencia y las ventajas generales.
¿Qué es la mantención de un vehículo?
La mantención auto se refiere al conjunto de tareas y revisiones periódicas necesarias para garantizar que el vehículo funcione de manera eficiente y segura.
Estas incluyen inspecciones, cambios de fluidos, ajustes y sustitución de componentes que pueden desgastarse con el tiempo.
Lo que se hace en una mantención de un auto depende del tipo de revisión, pero las más comunes incluyen:
Cambio de aceite y filtro.
Inspección y reemplazo de frenos.
Revisión del sistema eléctrico (luces, batería).
Verificación del sistema de refrigeración.
Revisión de neumáticos (presión y desgaste).
Sustitución de filtros de aire y combustible.
Estas tareas forman parte de las mantenciones básicas de un auto, esenciales para mantener su desempeño y prevenir problemas .
¿Cada cuánto se hace mantención a un auto?
La frecuencia de las mantenciones varía según el fabricante, el modelo y el uso del vehículo. En general:
Los autos nuevos requieren una revisión inicial conocida como la primera mantención de un auto nuevo, que suele realizarse entre los 5.000 y 10.000 kilómetros.
Posteriormente, las mantenciones se programan cada 10.000 a 15.000 kilómetros o una vez al año, lo que ocurra primero.
La respuesta a cada cuánto se hace mantención a un auto también depende de factores como los tipos de autos y su motor (diésel o gasolina) y las condiciones de uso.
¿Qué mantenciones debo hacerle a mi auto?
Es importante seguir el plan de mantenimiento que entrega el fabricante. Este incluye tareas específicas según el kilometraje del vehículo. Algunas de las revisiones son:
Cambio de aceite y filtros: cada 5.000 a 10.000 kilómetros.
Revisión de frenos: cada 20.000 kilómetros o antes si se detectan signos de desgaste.
Reemplazo de bujías: cada 30.000 a 50.000 kilómetros.
Cambio del líquido de transmisión: generalmente cada 40.000 kilómetros.
Revisión del sistema de refrigeración: cada dos años o según el manual.
Estas son las respuestas más comunes a qué mantenciones se le deben hacer a un auto y qué mantenciones se le hacen a un auto para garantizar su funcionamiento óptimo.
Mantención básica de un vehículo: lo esencial
La mantención básica de un vehículo incluye tareas simples pero fundamentales que cualquier propietario debe realizar con regularidad:
Revisión de niveles de aceite, refrigerante y líquido de frenos.
Inspección de las luces y el sistema eléctrico.
Verificación de la presión y el estado de los neumáticos.
Limpieza de filtros de aire.
Estas tareas pueden realizarse en casa o en talleres especializados, y forman parte de las mantenciones de un vehículo más accesibles.
Mantención de vehículos diésel
En el caso de la mantención vehículos diésel, hay algunas diferencias importantes debido a las características del motor. Las tareas clave incluyen:
Cambio regular del filtro de combustible para evitar obstrucciones.
Verificación del sistema de inyección y limpieza de los inyectores.
Inspección del turbocompresor, si aplica.
Los motores diésel suelen requerir revisiones más específicas, pero siguen los mismos principios generales que otros tipos de vehículos.
Por su parte, los motores eléctricos de los autos necesitan limpieza regular para mantenerlos libres de polvo y otros agentes nocivos, y revisión cada cierto tiempo para ver su desgaste.
En este sentido, el mantenimiento de un vehículo eléctrico es hasta un 30 % más económico. Como ejemplo de ello tienes el Renault Kwid E-Tech, un hatchback eléctrico que promete una conducción limpia, silenciosa y un torque instantáneo para una respuesta ágil.
Ventajas de realizar mantenciones regulares
Realizar las mantenciones de un vehículo en los intervalos recomendados ofrece varios beneficios:
Mayor seguridad: un vehículo en buen estado reduce el riesgo de fallas mecánicas y accidentes.
Ahorro económico: previene reparaciones costosas al identificar problemas antes de que se agraven.
Mayor vida útil del auto: las revisiones periódicas minimizan el desgaste de los componentes.
Optimización del rendimiento: mejora el consumo de combustible y el desempeño general del automóvil.
Preservación del valor del vehículo: un auto bien mantenido conserva su valor en el mercado de reventa.
Estas ventajas destacan la importancia de realizar las mantenciones básicas de un auto y las revisiones más avanzadas.
La mantención de vehículos es un aspecto esencial que todo propietario debe priorizar.
Desde la primera mantención de un auto nuevo hasta las revisiones periódicas más avanzadas, seguir un plan de mantenimiento preventivo adecuado garantiza seguridad, eficiencia y durabilidad.
¡Asegúrate de realizar las tareas básicas y seguir las recomendaciones del fabricante para mantener tu vehículo en las mejores condiciones!
Noticias